La fibra es uno de los componentes imprescindibles en cualquier dieta equilibrada y saludable. Su consumo habitual no solo ayuda a regularizar el tránsito intestinal y a controlar el peso por su efecto saciante, también puede ayudar en la prevención de algunas enfermedades.
Un pequeño gesto, como incrementar el consumo de alimentos ricos en fibra natural, nos ayudará a sentirnos mejor y a proteger nuestra salud. Si te preocupa tu bienestar nutricional, la fibra puede ser tu aliada.
Qué debo saber de la fibra alimentaria
La fibra alimentaria es un componente natural presente en alimentos vegetales. Su característica principal es el no ser digerible por las enzimas digestivas, y parte de ella es fermentada por las bacterias del colon. Curiosamente, pese a que sus sustancias no pueden ser digeridas directamente por el organismo, tiene grandes beneficios para el sistema digestivo. Hay dos tipos de fibra:
Fibra soluble
La fibra soluble es aquélla que se disuelve en agua formando compuestos gelatinosos. Tiene capacidad de absorber agua, aumentando el volumen de las heces. Se fermenta en el colon, generando ácidos grasos que aportan energía, y contribuye a que el organismo absorba de manera más paulatina la glucosa y el colesterol. Está presente en alimentos como las legumbres, las frutas, el salvado, la avena o las zanahorias.
Fibra insoluble
La fibra insoluble no se disuelve en agua, pero es capaz de agilizar el tiempo de tránsito intestinal, con lo que ayuda a prevenir el estreñimiento, al aumentar el volumen de las heces. Algún ejemplo de alimentos que contienen este tipo de fibra, son los cereales integrales, los frutos secos, las hortalizas de hoja verde o el pan integral.
Enriquecer nuestra dieta habitual con alimentos ricos en cualquier de los dos tipos de fibra es beneficioso para nuestra salud. La ingesta de fibra diaria recomendable para un adulto se sitúa, según los estudios, entre 20 y 35 gramos al día. Una cantidad no muy elevada, pero que en general la población española no cumple. En España consumimos de media 15,8 g/día, según un estudio de ANIBES, siendo la comida y la cena los momentos del día en el que tomamos alimentos más ricos en fibra.
Cómo incorporar más fibra a mi dieta
Los beneficios de la ingesta de fibra bien merecen un cambio de hábitos saludables en nuestra dieta. Es tan sencillo como incorporar rutinas a cada una de nuestras comidas.
- Desayuno: Los cereales integrales son una gran fuente de fibra, por lo que incorporarlos al desayuno junto a los frutos secos o la fruta es una opción saludable.
- Comida: Las legumbres y las verduras/hortalizas suponen un aporte importante de fibra. Elige brócoli, coliflor, acelgas o coles de Bruselas, si quieres un aporte extra. Combinarlas para incorporarlas diariamente en las comidas o en las cenas es una fórmula sencilla para cumplir a diario con la cantidad recomendada.
- Cena: Las ensaladas son nuestro mejor aliado para una cena ligera y saludable. Incorpora al aliño semillas de chía y estarás haciendo un aporte extra de fibra a tu plato. Tienen un 35% de fibra y son además fuente de múltiples nutrientes.
No olvides beber agua, tanto durante las comidas, como a lo largo del día, para que la fibra tenga su efecto beneficioso sobre el tránsito intestinal.
Suplementos naturales para reforzar tu microbiota
Si eres de quienes prefiere no estar pendiente del diseño equilibrado de tu menú, en el mercado existen productos que facilitan alcanzar el aporte diario recomendado de fibra. Es el caso del preparado lácteo Fibra Natural de Central Lechera Asturiana. Es apto para celíacos, y un vaso contiene el 40% de la cantidad diaria recomendada de fibra.
Fibra Natural añade fibra a la dieta de forma totalmente natural, ya que la fibra que contiene se extrae de vegetales como la achicoria y el maíz. Solo contiene ingredientes 100% naturales: Leche semidesnatada y fibra natural, cumpliendo así con el compromiso de Central Lechera Asturiana por una alimentación saludable y sin E-s artificiales.
El tipo de fibra presente en esta bebida láctea es soluble: inulina y maltodextrina resistente a la digestión (MRD). Entre sus beneficios para la salud está la mejora de la regularidad intestinal, y su contribución a reforzar la microbiota intestinal, por su efecto prebiótico. Se considerá prebiótico a un ingrediente alimentario que, al ser fermentado de manera selectiva es capaz de producir cambios en la composición y actividad de la microbiota intestinal, generando beneficios para la salud.
Fibra Natural es además recomendable para toda la familia, que se puede mezclar con café o con cacao, o con lo que más te guste. Combinada en el desayuno con otros alimentos ricos en fibra como los cereales, los frutos secos o la fruta estarán aportando más de la mitad de la cantidad diaria de fibra recomendada.
Fibra Natural, una opción sin E-s Artificiales
Esta bebida láctea, que conserva el mejor sabor de la Leche Central Lechera Asturiana, cumple además con el compromiso de la marca con una alimentación 100% natural y sin aditivos artificiales. Fibra Natural no contiene E-s artificiales y, como en todos los productos de Central Lechera Asturiana, las etiquetas están claras y al frente. Un ejercicio de responsabilidad y transparencia frente al consumidor, que cada vez más exige información de la composición de los alimentos para apostar por alternativas sanas y naturales.
Si eres de quienes se preocupa por la alimentación, recuerda, enriquecer tu dieta con productos naturales y ricos en fibra te ayudará a prevenir enfermedades, reforzará la microbiota intestinal y contribuirá a controlar tu peso de manera natural.