Los garbanzos son una excelente fuente de proteína vegetal y nos ayudan a complementar nuestra dieta, ya que las legumbres son una parte muy importante en una alimentación equilibrada. Dan mucho juego, porque combinan bien con casi todo, y aportan a los platos una textura diferente que conquista.
Esta receta de garbanzos con tomate y cebolla es perfecta si quieres degustar un plato ligero y sano. Es ideal para llevar a la oficina, como entrante o acompañante. Y si tienes hijos y quieres incluir más legumbres en su alimentación, este plato también es para ti, ya que la salsa de tomate y cebolla les encantará. También es un perfecto acompañamiento con arroz o como guarnición para carnes o pescados. No te pierdas esta opción vegetariana que tanto gusta.
Te enseñamos a preparar la mejor receta de garbanzos con tomate y cebolla que prepararás en muy poco tiempo y es muy asequible. Y lo mejor, ¡que está delicioso!
Si quieres aprender nuevas recetas saludables de garbanzos en Central Lechera Asturiana te enseñamos cómo preparar la mejor receta de pollo con garbanzos, puré de garbanzos con judías y nuestra receta de hummus de garbanzos con vídeo incluido ¡están deliciosas!
Lo primero que tenemos que hacer es dejar los garbanzos a remojo, entre 8-12 horas, dependiendo del tipo de garbanzo que utilices.
Después de dejar los garbanzos en agua, utilizaremos una olla express para cocerlos con agua y una pizca de sal. Necesitaremos unos 45 minutos mínimo para que los garbanzos nos queden en el punto perfecto. Escurrimos y separamos.
Vamos a pelar y picar bien finitos los ajos y la cebolla. Ponemos una sartén al fuego con un poco de aceite de oliva virgen extra para rehogar el ajo y la cebolla hasta que estén tiernos y dorados.
Entonces añadimos el tomate triturado, la sal y las especias, tapamos y dejamos que se cocine durante 10 minutos.
Añadimos los garbanzos y dejamos que absorban todo el sabor de la salsa a fuego lento 10 minutos.
Prueba y ajusta la sal y la pimienta al gusto. Servimos calentito ¡y a disfrutar!
Si quieres reducir el tiempo de elaboración, puedes comprar garbanzos cocidos, pero nuestro consejo es que es mucho más sano que los prepares tú.
Utiliza siempre tomate triturado natural, no tomate frito, ya que suele tener muchos azúcares y así la receta te quedará más sana.
Si lo que quieres es una receta más contundente puedes añadir unos taquitos de jamón serrano, ¡queda increíble!