El plátano es uno de los alimentos que más saciedad producen. Contiene minerales como el potasio, magnesio y fósforo, compuestos fenólicos y vitaminas del grupo B, vitamina A y carotenos, que favorecen el sistema nervioso y muscular.
Contiene almidón resistente, un carbohidrato que “resiste” la digestión y llega íntegro al intestino, donde es fermentado por las bacterias duodenales. Este tipo de almidón actúa de manera similar a la fibra: acorta el tiempo de tránsito intestinal, disminuye los niveles de glucosa en sangre y con ello, el nivel de colesterol, reduciendo el riesgo de desarrollar diabetes de tipo 2. Este tipo de almidón es capaz de ayudar a mejorar la respuesta inmune.
Fuente de nutrientes y antioxidantes
El plátano es una fuente excelente de potasio, que favorece el funcionamiento normal de los músculos y del sistema nervioso. También ayuda en la eliminación de líquidos y compensa el exceso de sodio en la dieta, con lo que podría ser útil en casos de hipertensión arterial.
Aporta vitaminas del grupo B, que tienen un efecto protector sobre el sistema inmune y el sistema nervioso. Además, el almidón resistente incremente la absorción de estas vitaminas. El plátano es una buena fuente de vitamina B6: una ración de 160 g contiene 0,54 mg de esta vitamina. Se recomienda una ingesta diaria de 1,4 mg de vitamina B6.