La Fibra, una aliada contra múltiples enfermedades
La fibra dietética forma parte de lo que se considera una dieta saludable.
Las fibras dietéticas alcanzan el intestino grueso y son atacadas por la microflora colónica, dando como productos de fermentación; ácidos grasos de cadena corta, hidrógeno, dióxido de carbono y metano.
Estos ácidos grasos representan no solo una forma de recuperar energía, sino que participan en funciones beneficiosas para el organismo. Se recomienda 20-35 g/día de fibra de diferentes fuentes.
Una dieta rica en fibra es recomendable desde los primeros años de la vida. A menudo va acompañada de un estilo de vida que a largo plazo ayuda a controlar otros factores de riesgo.
Fibra como marcador de otros nutrientes
La fibra dietética es marcador de otros nutrientes en los alimentos que son naturalmente, ricos en fibra, particularmente los fitoquímicos. El efecto saludable de la fibra puede deberse, tanto a ella en sí, como a los componentes añadidos que lleva. Por otro lado, las personas que toman una dieta alta en fibra suelen estar más educados en la salud. Por ello, los estudios de tipo observacional pueden estar sobredimensionados. Con todo, es muy probable la relación causa-efecto en los beneficios sobre la salud observados en grandes consumidores de fibra.
Una dieta alta en fibra podría protegernos en un amplio rango de enfermedades.
Comparando una dieta alta en fibra con una baja en fibra, descubrimos que la alta en fibra, supone grandes ventajas. Los datos observados sugieren las siguientes mejoras sobre la salud, con reducción del 15-30% de mortalidad por diversas enfermedades como:
• Sistema cardiovascular
• Enfermedad coronaria
• Derrame cerebral
• Diabetes de tipo 2
• Cáncer colorrectal
Además, ensayos clínicos mostraron que la fibra dietética reduce el peso corporal, la presión arterial sistólica y el colesterol total. Así, dado que los hallazgos de los estudios observacionales prospectivos y los ensayos clínicos fueron complementarios y que hubo evidencia de una respuesta a la dosis sorprendente, la relación entre una dieta alta en fibra y un menor riesgo de enfermedad podría ser causal. Por un lado, su consumo se asocia con un menor peso, reduciendo el riesgo de diabetes, enfermedad cardiovascular y cáncer. A mayores, la fibra parece tener beneficios independientes de su efecto sobre el peso.
¿Qué nos sugieren estos hallazgos?
Estos hallazgos y otros, sugieren que prácticamente cualquier persona que quiera reducir elriesgo de padecer una variedad de dolencias, incluidas las enfermedades cardiovasculares y múltiples tipos de cáncer, como el de ovario, páncreas e hígado, así como el colorrectal, debería consumir más, no menos, carbohidratos, siempre y cuando sean buenos carbohidratos, es decir, granos enteros ricos en fibra, legumbres, frutas y verduras.
Sin embargo, en los países occidentalizados, pocas personas consumen cerca de las cantidades recomendadas. En los Estados Unidos, la ingesta de este nutriente en hombres y mujeres adultos es de 18 y 15 gramos/día respectivamente. Datos obtenidos de la Encuesta nacional de examen de salud y nutrición (NHANES) 2013-2014. Sin embargo, sus pautas dietéticas 2015-2020 recomiendan una ingesta diaria mínima de 33. 6 gramos/día para los hombres y 28 para las mujeres de 19 a 30 años de edad, y solo cantidades ligeramente menores a medida que las personas envejecen.