Se vincula la fibromialgia a ciertos desórdenes del microbioma.
Un equipo de investigadores de la Universidad McGill de Canadá ha descubierto que las personas que padecen fibromialgia muestran cambios en su microbiota intestinal, el conjunto de bacterias que viven en el intestino.
La fibromialgia se caracteriza por un dolor crónico generalizado que afecta al 2-4 % de la población y no tiene cura conocida. Los síntomas incluyen dolor generalizado, fatiga, problemas para dormir y dificultades cognitivas.
La salud y el equilibrio del microbioma intestinal es reflejo de la salud de nuestro organismo. Su desequilibrio o disbiosis puede provocar enfermedad.
Ahora, científicos descubren la relación entre la fibromialgia y disbiosis en las personas que padecen este trastorno.
Según el nuevo estudio, la abundancia o ausencia de determinadas bacterias determina la gravedad de los síntomas de la fibromialgia
El estudio, que comparó mujeres con y sin fibromialgia, ha vinculado, por primera vez, las bacterias intestinales con esta enfermedad y sus síntomas principales.
Los investigadores, de la Unidad de Control del Dolor Alan Edwards en la Universidad McGill (Canadá), identificaron 19 especies de bacterias intestinales que estaban presentes en mayor o menor número de individuos con fibromialgia. El estudio ha sido publicado en la revista Pain
Datos del estudio
156 mujeres participaron en el estudio. De ellas, 77 tenían fibromialgia, mientras que, las 79 sanas restantes, formaban el grupo control.
Por un lado, algunos de los participantes del grupo de control eran hermanos, descendientes o padres de personas con fibromialgia. Otros participantes del grupo control, no eran familia, pero compartían espacio vital con las personas con fibromialgia.
Todos los participantes dieron muestras de heces, orina y saliva. Además, también se sometieron a entrevistas.
Los investigadores analizaron los datos de las pruebas en las muestras y de las entrevistas. Finalmente, compararon los resultados de los participantes con fibromialgia con los de sus homólogos sanos.
Resultados y conclusiones de los autores
El coautor del estudio, Emmanuel González, comentó: «Clasificamos grandes cantidades de datos, identificando 19 especies de bacterias intestinales que aumentaron o disminuyeron en individuos con fibromialgia«.
Usando el aprendizaje automático, un tipo de inteligencia artificial, para analizar los microbiomas en las muestras de heces, el equipo pudo identificar qué participantes tenían fibromialgia con una precisión del 87,8%.
«Observamos una asociación cuantitativa entre la abundancia de varias especies de bacterias y la gravedad de los síntomas relacionados con la fibromialgia, incluida la intensidad del dolor, la distribución del dolor, la fatiga, los trastornos del sueño y los síntomas cognitivos«, subrayan los autores.
Añaden que la «abundancia» de la especie de bacteria también «se correlaciona selectivamente con los síntomas relacionados con la enfermedad, pero no con las variables independientes de la enfermedad».
Por su parte, los investigadores planean replicar los hallazgos en un grupo más grande y geográficamente diverso de participantes. También desean llevar a cabo estudios en animales para descubrir si las bacterias intestinales realmente intervienen en la formación de la fibromialgia.
Esta es la primera evidencia, al menos en humanos, de que el microbioma podría tener un efecto en el dolor difuso, y realmente necesitamos nuevas formas de ver el dolor crónico», concluye Yoram Shir.
Fuente
Altered microbiome composition in individuals with fibromyalgia. Amir Minerbi;Emmanuel Gonzalez;Nicholas Brereton;Abraham Anjarkouchian;Ken Dewar;Mary-Ann Fitzcharles;Stéphanie Chevalier;Yoram Shir. PAIN. Publish Ahead of Print():, JUN 2019 DOI: 10.1097/j.pain.0000000000001640 Publication Date: 2019/06/01