Los científicos han tratado de alterar la flora intestinal humana para mejorar la salud mediante la introducción de bacterias probióticas beneficiosas, pero los probióticos comercialmente disponibles no se establecen en el intestino. Un estudio publicado en «Cell Host & Microbe» sugiere que es posible alterar el ecosistema microbiano en el intestino humano durante al menos seis meses mediante la introducción de una única cepa bacteriana ecológicamente adecuada.
El trabajo sugiere que la adaptación de la cepa bacteriana correctamente con el medio ambiente intestinal es crucial para hacer un cambio real. Esto abre la posibilidad de reintroducir una bacteria que falta con un resultado de salud en mente. Así, un equipo internacional de investigadores probó la persistencia de una cepa bacteriana llamada ‘Bifidobacterium longum AH1206’ en el intestino humano, una bacteria que se encuentra en la lista de las presentes en el intestino humano. Es una de los 50 más comunes entre los cientos de especies de bacterias que se encuentran normalmente en el intestino humano.
En un ensayo doble ciego, controlado con placebo de 22 personas, la mitad de los participantes tomaron dosis diarias de probióticos ‘Bifidobacterium longum AH1206’ y la otra mitad un placebo. Después de dos semanas, cambiaron el régimen de tratamiento y Walter y sus colegas rastrearon los cambios en el microbioma intestinal a través del tiempo, mirando la composición bacteriana y la genética.
El 30% de los que tomaron un probiótico con esta cepa bacteriana experimentó la colonización duradera de la cepa y se consideraron como persistentes: sus intestinos estaban colonizados por la cepa ‘Bifidobacterium longum AH1206’ seis meses después de haber dejado de tomar los probióticos.
Los datos mostraron que los intestinos de estos participantes diferían de los que no tenían un efecto de larga duración del probiótico. Antes del tratamiento, en los que persistía había niveles más bajos de la especie ‘Bifidobacterium longum’ o genes que se encuentran en cepas similares.
Los resultados sugieren que en las personas que han perdido o nunca han adquirido una cierta cepa valiosa de bacterias del intestino debido al uso de un antibiótico o algún otro evento, podría ser posible repoblar el ecosistema intestinal.
Fuente: http://media.wix.com/ugd/6672f8_019c8bff5b9248b29729caf74909fc84.pdf