Las situaciones estresantes pueden erradicar cualquier beneficio para la salud que una persona pudiera haber obtenido al elegir un desayuno rico en grasas monoinsaturadas «buenas», en lugar de un desayuno lleno de grasas saturadas «malas», según un estudio de la Universidad Estatal de Ohio.
«A nivel fisiológico es como si hubieran ingerido una comida rica en grasa saturada», comentó la investigadora líder, Janice Kiecolt-Glaser, respecto a las personas del estudio que comieron la comida saludable pero que estaban estresadas. «La ventaja por haber comido la opción más saludable desapareció».
Para ver cómo el estrés podría afectar a la grasa de la dieta, Kiecolt-Glaser y sus colaboradores reclutaron a 58 mujeres sanas para que comieran dos desayunos casi idénticos en ocasiones distintas en dos días separados en su clínica. La edad promedio del estudio fue de 53 años.
Ambos desayunos consistían en panecillos y salsa de carne, cada uno contenía unas 930 calorías y 60 gramos de grasa.
Hubo una diferencia importante. Un desayuno se hizo sobe todo con grasa saturada, y el otro contenía aceite monoinsaturado de girasol, según el estudio.
Las mujeres también completaron una entrevista estándar sobre las situaciones estresantes vividas en días anteriores. «Es una entrevista que separa las frustraciones menores de los eventos que son más significativos y que es más probable que produzcan cambios fisiológicos relacionados con el estrés», comentó Kiecolt-Glaser.
Las mujeres libres de estrés tendían a tener unos mejores resultados en los análisis de sangre tras comer los panecillos y la salsa de carne con grasa monoinsaturada, en comparación con cuando comieron la alternativa rica en grasa saturada, mostró la investigación.
Esas mujeres tenían unos marcadores de inflamación más bajos, y también tuvieron resultados más bajos en un análisis de las moléculas de adhesión, una sustancia que aumenta las probabilidades de que se formen placas en las paredes de los vasos sanguíneos, provocando endurecimiento de las arterias, reportó el estudio.
Pero cuando las mujeres del estudio habían tenido un evento estresante antes de la prueba del desayuno, las dificultades del día anterior parecieron borrar cualquier beneficio vinculado con una opción de grasa saludable.
FUENTES: Janice Kiecolt-Glaser, Ph.D., director of the Institute for Behavioral Medicine, Wexner Medical Center, Ohio State, Columbus, Ohio; Penny Kris-Etherton, Ph.D., R.D., distinguished professor of nutrition, College of Health and Human Development, Penn State University; Jennifer Kartashevsky, R.D., certified diabetes educator, Diabetes Alliance Program, Mount Sinai Health System, New York City; Sept. 20, 2016, Molecular Psychiatry.