¿Te apetece hacer un viaje a la dulce Italia? Esta receta de Panna Cotta hará las delicias de los más golosos y, además, es muy fácil de preparar.
Actualmente, existen un montón de recetas de postres que incluyen muchas complicaciones. Sin embargo, algunas de las recetas clásicas, como esta de Panna Cotta que te presentamos, cuenta con un sabor único que te encantará a ti y a los tuyos. Se prepara muy rápido y, si has organizado una comida o cena, tus invitados quedarán impresionados. ¡Pongámonos manos a la obra!
Para comenzar esta receta de Panna Cotta, hay que elaborar la mermelada de frambuesa. Coge un cazo y pon las frambuesas, el zumo de 1 limón colado y tu endulzante favorito y deja cocinar a fuego muy lento durante 15-20 minutos.
Una vez esté lista la mermelada, la ponemos un bol y la reservamos.
Mientras se hace la mermelada, ponemos a remojar las láminas de gelatina en agua fría.
A continuación, en un cazo, vertemos la nata para repostería Central Lechera Asturiana y la ponemos a fuego lento. ¡Este es el momento de endulzar el postre a tu gusto y con tu producto favorito!
Mientras tenemos la nata a fuego lento, es hora de sacar las semillas de la vaina de vainilla para añadirlas al cazo con la grappa.
Asimismo, escurriremos la gelatina (que ya estará hidratada) y también la añadimos al cazo.
Cuando todos los ingredientes se hayan integrado bien, pondremos la mezcla en moldes, los tapamos con film y los dejamos enfriar.
Para desmoldar de manera sencilla, ponemos los moldes en un bol con agua hirviendo y los remojamos un poco. De esta forma, conseguiremos que se despeguen fácilmente y mantengan su forma original.
Finalmente, colocamos la mermelada de frambuesa que preparamos al inicio por encima y un par de frambuesas para decorar. ¡Para chuparse los dedos!
Al preparar la mermelada, no olvides dejar el cazo destapado para que pierda humedad.
Es muy importante remover bien la mezcla a fuego lento cuando añades la gelatina, ya que si no se deshace bien, puede que luego te encuentres trozos indeseados de este producto en la Pana Cotta.
¿Un truco para sacar las semillas de la vaina de vainilla? Ábrela de forma transversal y rasca con la punta de un cuchillo. ¡Verás qué fácil!